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¿Decidiste quitarte la ropa en la playa? Bien por ti. Las razones que esgrimen los nudistas para andar por ahí desnudos son muchas y variadas, la verdad es que a la hora de estar frente a tanta gente en pelotas, dan igual. Una cosa es cierta: los nudistas se sienten más cómodos con su cuerpo, tienen mayor autoconfianza y seguridad.

La cuestión es que la falta de ropa impone ciertos protocolos, muchos de ellos implícitos. Si te animas, cumple con ellos, y te evitarás momentos incómodos.

No tomes fotos. Con la pena (o para evitártela), tendrás que aguantar las ganas de postear en Facebook.

Cuida tus posturas. Sentido común, por favor, nada de piernas abiertas.

Llévate un libro o un juego. Ocúpate en algo para evitar dar o recibir miradas incómodas.

Separa el sexo de la desnudez. Te será difícil, pero te quedará claro ahí: el desnudo está dado, el sexo hay que ganárselo con la seducción habitual.

Se vale ligar. Igual que como si estuvieras vestido.

Las erecciones. Se valen si estás dormido, si estás en compañía son inaceptables.

Si te animas a probar si el nudismo es para ti, unas vacaciones sin marcas de traje de baño te darán la respuesta.

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