¿Qué hace a una relación feliz y duradera o corta e insatisfactoria? Según los expertos, “el secreto” de las historias de amor que permanecen en el tiempo no está en que parezcan “de película”, sino en la suma de detalles y hábitos positivos cotidianos sobre los que se construye.
Y tampoco es un gran mal paso lo que destruye un romance, sino la suma de hábitos negativos, distracciones o estancamientos comunes. “Esto ocurre cuando no ponemos atención a lo que hacemos o decimos y terminamos cayendo en una zona de confort que no nos deja dar lo mejor de nosotros”, expresa el psicoterapeuta Barton Goldsmith, autor The Happy Couple: How to Make Happiness a Habit One Little Loving Thing at a Time. “Por desgracia, aun cuando tú no te des cuenta, tu pareja sí lo siente y es muy probable que la lastimes con tus palabras o acciones”.
“Los malos hábitos se exhiben de muchas maneras, desde ser grosero en una discusión, hasta olvidar dar las gracias por las pequeñas cosas que la pareja hace siempre por nosotros; desde no saludar con afecto después de un largo día separados, hasta asumir que el otro ya sabe lo que pensamos y sentimos (y enojarnos si no lo adivina)”.
Las costumbres negativas pueden ser obvias o sutiles o en apariencia inofensivas, pero erosionan la estabilidad y dejan huella. Sin embargo, es posible cambiarlas por otras constructivas. Son las conductas y actitudes positivas y frecuentes, y no los gestos costosos o grandilocuentes lo que hacen la diferencia. Presta atención a estos tips:
1) Te hablan, responde.
Durante el tiempo diario que pasan juntos, cada miembro de una pareja suele enviar señales de conexión emocional. Puede ser “mira este video” o “¿ya viste tal anuncio?” o alguna invitación o comentario para compartir información no necesariamente profunda. John Gottman, uno de los más importantes especialistas en relaciones de pareja del mundo, autor de Principia Amoris: The New Science of Love, los llama “bids” u “ofertas”. Estas interacciones tienen un gran impacto en el bienestar de una pareja: aquellos que se dieron vuelta a ver qué quería su marido o esposa un 33% de las veces, estaban separados seis años después. En cambio, aquellos que prestaron atención el 87% de las veces, estaban todavía juntos.
2) Evita la “tecnoferencia”.
Uno de las distracciones destructivas más comunes en la actualidad, que hacen que no se preste a atención a la pareja (ni a nadie en realidad), es estar abstraído en el smartphone (u otro dispositivo). Los expertos lo llaman “tecnoferencia o interferencias de la tecnología”. Aquellas personas que permiten más tecnoferencia en sus vidas tienen más conflicto y mayor insatisfacción en sus relaciones y en su vida en general.
3. Di gracias.
Dar las gracias de manera clara y concreta a tu pareja la hará sentirse comprendida, valorada y cuidada. Una investigación publicada en el Journal of Positive Psychology encontró que la persona que recibe la gratitud tiene más motivación para mejorar sus cualidades, relaciones y compromisos. Deja post-its de agradecimiento en rincones inesperados, menciona tu satisfacción, haz algo que muestre claramente que estás feliz y valoras lo que te recibes de tu pareja.
Fuente: Women’s Health