La infidelidad, comúnmente conocida como «poner los cuernos», es un tema delicado y complejo en cualquier sociedad, y México no es una excepción. La forma en que los mexicanos viven y enfrentan la infidelidad puede variar ampliamente según la cultura, las creencias personales y las circunstancias individuales. Aquí exploraremos algunas perspectivas sobre cómo se experimenta y se aborda este tema en México.
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Una investigación con 16,288 voluntarios de 50 países (publicada en la revista Journal of Personality and Social Psycology) intentó cuantificar el deseo hacia compañeros ajenos a la pareja durante un mes. Y las conclusiones arrojaron que los hombres deseaban compañeras diferentes en un 1.87%, frente al 0.78% de las mujeres. ¿Tú qué opinas?
Según la antropóloga Helen Fisher, los hombres y las mujeres buscan por lo general obtener distintas satisfacciones de sus aventuras. Los hombres tienden a establecer relaciones extraconyugales por el puro placer sexual, mientras que las mujeres se inclinan por la intimidad emocional y el compromiso. También, los estudios demuestran que las mujeres que tienen aventuras piensan que sus matrimonios son desgraciados o buscan afuera el apoyo emocional que no obtienen de sus maridos, a diferencia de los hombres, ya que ellos tengan o no cubiertas sus necesidades, muchas veces buscan fuera de sus relaciones encuentros sexuales por el puro placer.
De hecho, existen acercamientos similares en varias culturas. En países tan distintos como Zimbabwe, Australia, Finlandia, Inglaterra, Japón y Holanda, los hombres son más proclives a tener encuentros sexuales breves, separados del amor, mientras que las mujeres buscan más intimidad emocional con sus amantes.
¿Qué sucede en México al respecto?
Según una encuesta sobre el tema, estos son los números:
- Más de 1 de cada 3 adultos dicen que se atreverían a ser infieles.
- El 71% dice que se divorciaría en caso de enterarse de una infidelidad.
- El 27% dice que no se divorciaría aún enterándose de una infidelidad.
- En una escala de 0 a 10 para evaluar la fidelidad de la pareja, los mexicanos la califican en promedio con 8.1.
- El 58% califica con 9 o 10 (alta fidelidad).
- El 15% asigna calificación menor a 6; es decir, casi 1 de cada 6 ciudadanos acepta la baja fidelidad de su pareja.
- El 27% la califica de 6 a 8; es decir, tiene sus dudas.
- Los hombres son los que más confianza le tienen a su pareja al asignarle un 8.8 en promedio a su fidelidad, en cambio las mujeres califican en promedio con 7.4 la fidelidad de sus parejas. El 22% de ellas lo reprueban totalmente.
Es importante destacar que las actitudes hacia la infidelidad varían ampliamente de una persona a otra, y no hay una única forma de vivirla en México. Cada relación es única, y las parejas enfrentan desafíos y toman decisiones basadas en sus propios valores, creencias y circunstancias individuales. La infidelidad, en última instancia, es un tema complejo que requiere un enfoque cuidadoso y considerado para comprender y abordar en cualquier sociedad. La comunicación abierta y honesta es clave para abordar y resolver problemas en una relación. Algunas parejas mexicanas eligen hablar abiertamente sobre sus deseos, expectativas y preocupaciones en relación con la monogamia y la fidelidad, lo que puede ayudar a prevenir situaciones de infidelidad.
Fuente: Consulta Mitofsky
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