Se supone que lo más atrevido que puedes hacer con tu mujer es tener sexo… Sin embargo, existen otras prácticas que van mucho más allá en cuestiones de intimidad. Tal es el caso de la masturbación en pareja, que aunque podría sonar imponente al principio, es una de las formas más deliciosas para conectar y vivir el placer en pareja. Es muy sencillo de entender: con la masturbación mutua estás dejando que ella te mire y te escuche mientras haces algo que la mayoría de la gente solo hace a puerta cerrada. Esta situación puede hacerte sentir una mezcla emocionante de poder y vulnerabilidad al mismo tiempo, y excitar a tu pareja a un nivel súper alto. Masturbarse juntos también puede ser una excelente manera de aumentar la lìbido y funciona como un foreplay exquisito.
Si deseas probar esta delicia del mundo del sexo pero no sabes ni por dónde empezar, no te preocupes, aquí te vamos a dar unos cuantos tips para sugerírselo a tu pareja y comenzar a disfrutar de tus sesiones masturbatorias con ella. Continúa leyendo y toma nota.
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Puedes meter la idea de masturbación mutua de varias maneras. Ya sea que le envíes un mensaje de texto sexy durante su día de trabajo, o simplemente decidas hacerlo de una forma más directa, y decirle que sería atractivo mirarse mutuamente al hacerlo. Una de las ventajas de la masturbación mutua es que pueden tocarse; aunque, sin dudarlo, también puedes meterle un poco de diversión si juegas con reglas como “no tocar”.
Una vez que estés seguro de hacerlo –y ella también–, pónganse cómodos. Encuentren una posición en la que puedan verse y gozarse. Por lo general, esto es uno frente al otro ya que muchas personas disfrutan del contacto visual durante la masturbación mutua. A algunas personas incluso les gusta sentarse a horcajadas sobre el cuerpo de su pareja mientras se masturban, lo que proporciona un punto más cercano de vista. No importa cómo se acomoden sino que ambos se sientan cómodos y experimenten para encontrar lo que les funciona.
Masturbarte frente a tu pareja puede hacerte sentir muy expuesto. Si es así, puedes hacerlo gradualmente. Lo ideal es comenzar con las luces apagadas y poco a poco introducir la luz de una vela en lugar de tener la luz principal encendida. Una sesión de masturbación mutua es una excelente oportunidad para probar nuevos juguetes sexuales o usar los de confianza. Los juguetes aumentan el placer, pero también te van a dar una experiencia visual distinta a lo común.
No es necesario que digas algo si no quieres pero asegúrate de dejar escapar cualquier gemido entusiasta que surja de forma natural. Si te gustan las conversaciones sexys o el dirty talking, puedes decirle a tu pareja lo bien que se siente o lo excitado que estás, así como el momento en el que estás por venirte o cómo te gustaría verla venir a ella. Ya sabes, todo está en tu imaginación y tus ganas de disfrutar el momento. También puedes echarle la mano y jugar con sus pezones mientras ella se masturba o viceversa, se trata de gozar mutuamente y dejarse llevar por el momento.
Si crees que este tipo de juego es un paso que todavía no estás dispuesto a dar o que no se te va a ir la pena, no te preocupes. ¡Para eso está The Sensual Tea! Puedes compartir un sobre de granulado con tu pareja o una pastilla concentrada antes de pasar a la acción, esto pondrá las cosas en su punto y será mucho más fácil llegar al orgasmo. No olvides permanecer conectado con tu pareja. Puedes verla acariciarse durante un largo rato, pero mira hacia arriba para hacer contacto visual y mostrarle que estás ahí con ella, disfrutando del espectáculo. Toca su rostro, su mejilla, sus zonas íntimas… Tú ya sabes cómo le gusta.
Aunque comúnmente la masturbación mutua no sea tan conocida o practicada por las parejas, definitivamente vale la pena agregarla a tu repertorio y gozar como te lo mereces.
¡Libera tus orgasmos!
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